Ni una gota de agua, más de 30 grados en muchas zonas del país y sin cambios en el horizonte. Peor aún, si algo nos dicen las previsiones meteorológicas, es que la semana que viene va a ser peor y muchas partes de la península va a estar entre 6 y 10 grados por encima de lo normal.
Calor, calor y más calor. La primavera es una estación con muchos contrastes y, como llevamos comentando desde hace días, los 30 grados son una primaveral, sí; pero de la primavera de mayo. Para las fechas en las que estamos, la anomalía térmica es enorme: 10 grados sobre la media es un ‘arreón térmico’ muy considerable.
Sobre todo, porque lo que está provocando esta ‘pseudo-ola de calor‘ es un enorme anticiclón que anda bloqueando el acceso de cualquier borrasca profunda desde el Atlántico. Es decir, que notamos el calor (un calor que puede resultar muy agradable), pero lo realmente importante es la lluvia.
¿Pseudo-ola de calor? El problema que tiene el concepto de “ola de calor” es que no tiene en cuenta el momento del año en que se produce. Es algo absoluto. Por ello, para que sea oficialmente una ola se tienen que superar (durante al menos tres días y en un 10% del país) el 95% de las temperaturas máximas diarias de julio y agosto. Y eso es algo muy difícil en marzo; aunque fuera el mes de marzo más cálido del registro. Afortunadamente.
¿Cuándo lloverá pronto? Pues la tendencia sequísima de marzo nos dice que no y eso es relativamente raro. Si analizamos todas las Semanas Santas en abril entre 1991 y 2020, veremos que en tres de cada cuatro la lluvia hizo acto de presencia en casi todo el país.
Esto, en el fondo, es una buena noticia. Porque los modelos siguen insistiendo en que las precipitaciones de abril estarán “dentro de lo normal” y, precisamente por eso, mantiene abierta una puerta a la esperanza. Y es que, recordemos, si no llueve pronto… la situación se va a poner muy complicada.
No llueve sobre no mojado. El calor, la falta de lluvias y, sobre todo, el hecho de que llevemos una década en sequía tienen al campo español en jaque justo cuando las cadenas de suministros más se resienten (y, con él, el resto de la economía). El aceite de oliva o el jamón son solo los canarios en la mina de una escalada de precios que puede ser histórica.
El invierno 2022-2023 ya lo ha sido. Impulsado por un diciembre muy extraño, ya es oficialmente el más cálido de la serie histórica. Y, buena parte del país, ya está en riesgo muy alto de incendio. Además, no hace falta ni recordarlo, El Niño está llamando a las puertas.
¿Qué podemos esperar? En general, solo queda esperar un golpe de suerte. El refranero español nos invita a esperar con aquello de que “cuando marzo mayea, mayo marcea“, pero estos dos meses son tan críticos que si no ‘marcea’ (y no siempre ‘marcea’), si en abril no empieza a entrar agua en el país… la sequía va a pillarnos con el pie cambiado. Otra vez.
En Xataka | España está a punto de saltarse dos meses de golpe: AEMET ya prevé un calor récord este mes de marzo
Imagen | ECMWF
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La noticia El enemigo de España esta primavera se llama “el buen tiempo” (y lo vamos a tener hasta Semana Santa) fue publicada originalmente en Xataka por Javier Jiménez .