El ‘cripto invierno’ ha quedado atrás. Si el Bitcoin lleva un 2023 muy bueno, la segunda criptomoneda más importante está teniendo un camino similar. Ethereum se encuentra en un momento crítico, pues estos días se ha completado Shapella, su actualización más importante desde ‘The Merge’.
Ethereum ya es ‘PoS’ al completo. Todas las promesas que se presentaron con ‘The Merge’ ya están disponibles desde la actualización Shapella, la número 194.048. Ethereum ha cambiado del modelo ‘Proof of Work’ (PoW) al ‘Proof of Stake’ (PoS). Esto implica, entre otros aspectos, que se deja atrás la minería como en el Bitcoin y se permite el ‘staking’.
Esperando esta actualización desde finales de 2020. Con esta actualización, los validadores por fin pueden retirar sus ETH bloqueados. La función de ‘staking’ se había activado, pero esa “inversión” ha estado bloqueada durante varios años. Ahora ya no.
Aproximadamente la mitad de los 562.727 validadores están retirando algunos Ethereum, cosechando posibles beneficios que hayan tenido durante este tiempo y que no ha sido hasta Shapella cuando han podido moverlos de sitio.
Millones de Ethereum desbloqueados. Según se calcula, unos 18,1 millones de ETH han quedado desbloqueados, lo que equivale a más de 34.000 millones de euros.
Entre 2,8 y 3,2 ETH es la cantidad media que están retirando los inversores. Es decir, aunque Shapella ya permite retirar sus inversiones, la media es de unos pocos Ethereum. Previsiblemente es una cantidad similar a la rentabilidad que se habrá conseguido durante este tiempo bajo el proceso de ‘staking’.
Ethereum abraza un ecosistema más descentralizado. Por su naturaleza Ethereum ya era descentralizado, pero el paso al ‘Proof of Stake’ es un gran paso en esa dirección. Con Shapella cualquiera con un ordenador puede validar transacciones.
Si antes la mayor parte de los nodos estaba en exchanges externos como Coinbase o Binance, ahora se promueve el mantenimiento de un nodo propio, los llamados ‘monederos fríos‘.
Paradójicamente, el valor de Ethereum ha subido. Shapella permite que los inversores se lleven sus Ethereum, lo que técnicamente debería hacer bajar el valor. Sin embargo, esta libertad de movimientos ha sido bien recibida y Ethereum ha subido alrededor de un 10% desde la llegada de la importante actualización. Superando incluso la barrera de los 2.000 dólares.
Las cifras variarán en función de la semana, pero según apuntan servicios como Lookonchain, el número de depósitos ha llegado a ser superior al de retiros.
Muy consolidada como nº2. El dominio del Bitcoin es evidente, pero Ethereum lleva varios años en segunda posición y lejos de perder fuelle, ha logrado consolidarse como una alternativa muy válida a la criptomoneda más popular.
Ethereum dispone de millones de inversores y centenares de proyectos blockchain que funcionan con su protocolo. La llegada de Shapella, el ‘staking’ y la libertad de poder retirar los fondos quiere impulsar todavía más su uso.
Más allá del siempre volátil e impredecible valor que tengan estas criptomonedas, poco a poco sus sistemas se van actualizando para permitir nuevas formas de monetización.
Imagen | Vitaly Mazur
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La noticia Ethereum está recortando distancia al Bitcoin con una fórmula ganadora: ser más descentralizado que nunca fue publicada originalmente en Xataka por Enrique Pérez .