Aunque hay excepciones como Elon Musk, una de las primeras cosas que hacen los millonarios es comprarse un casoplón en algún barrio exclusivo de Malibú, Beverly Hills o en la una isla exclusiva como hicieron Jeff Bezos y Julio Iglesias en Billionaire Bunker. Por eso, el gobierno de Los Ángeles ha introducido un nuevo impuesto que grava a estas ostentosas propiedades. Esto es lo que están haciendo algunos de estos millonarios para esquivar a Hacienda y ahorrarse unos cuantos miles de dólares.
El impuestos a las mansiones. En otoño de 2022 las autoridades municipales de Los Ángeles hicieron un referéndum preguntando sobre la implantación de un nuevo impuesto que gravara de forma escalonada la venta de mansiones de lujo en las zonas residenciales de la ciudad para construir alojamientos para los sin techo de la zona. El impuesto, llamado Medida ULA, entró en vigor en abril de 2023.
El impuesto grava con un 4% las ventas inmobiliarias residenciales con un importe entre 5 y 10 millones, y con un 5,5% las superiores a 10 millones. Es decir, que si una mansión se vende por 5 millones de dólares, se pagan 200.000 dólares adicionales con este impuesto, mientras que si se vende por encima de los 10 millones de dólares, se pagan 550.000 dólares. Usando la calculadora de este impuesto, quien vendió su lujosa mansión en Beverly Hills a Jeff Bezos habría pagado la friolera de 10.412.500 de dólares, si no fuera porque el magnate la compró meses antes de entrar en vigor este impuesto.
Una buena causa con menos impacto del deseado. El motivo principal del impuesto es financiar la construcción de vivienda social para las personas sin techo y en riesgo de exclusión social.
Según un estudio, la implantación de la nueva tasa no iba a suponer un gran impacto en la compraventa de mansiones de lujo en la ciudad ya que la nueva carga solo afecta al 4% de las transacciones de bienes inmuebles de Los Ángeles, y el 72% de esas transacciones corresponden a propiedades con un valor superior a 10 millones de dólares.
Los impulsores del nuevo gravamen esperan un aumento de la recaudación de 900 millones anuales, frente a los 207 millones que se recogían antes de su implantación. Una previsión optimista ya que, al menos durante estos primeros meses en vigor, la venta de mansiones se ha frenado en seco.
Vender antes de su entrada en vigor. El pago de este impuesto corresponde al vendedor, por lo que una de las primeras medidas que adoptaron los millonarios propietarios fue agilizar el proceso de venta aplicando descuentos y dando toda clase de facilidades. En abril de 2022 se vendieron 50 mansiones que tendrían que tributar por este impuesto, frente a las 2 mansiones que se vendieron en abril de 2023 con el impuesto ya vigente. En marzo de 2023 se registraron 109 ventas de estas características.
Entre los que se apresuraron a hacer la mudanza de sus casas para ponerla a la venta encontramos nombres como Jim Carrey, quien puso en venta su casa tras vivir en ella durante 30 años por 29 millones de dólares. Como “extra” el actor incluyó la decoración de sus paredes con premios y el vestuario original de algunos de sus personajes más célebres. El actor Mark Wahlberg vendió su mansión de 2.800 metros cuadrados en febrero de 2023, aunque antes tuvo que aplicarle un importante descuento, pasando de los 87,5 millones iniciales a los 55 millones de dólares por los que se cerró el acuerdo.
La picaresca no es exclusiva de España. Cuando trata de ahorrarse una considerable cantidad de dinero, los millonarios y sus gestores afinan su ingenio para caminar sobre el filo de la legalidad y aprovechar cualquier vacío legal.
Para evitar el llamado impuesto a las mansiones de Los Ángeles algunos millonarios que han vendido sus casas tras la entrada en vigor de la nueva normativa, han dividido la propiedad y las han vendido todas al mismo comprador por un valor individual inferior a 4,99 millones de dólares. De ese modo, ninguna de las transacciones supera el límite de los 5 millones y la venta no estaría sujeta a este tributo.
Formulas directamente ilegales. Los más atrevidos se la juegan falsean el valor de la propiedad para luego justificar la diferencia con una compra anexa. Por ejemplo, vender una propiedad por 7 millones de dólares, pero reflejar que 4,99 millones corresponden a la vivienda, y el resto a los muebles o al coche que se encuentra aparcado en el garaje. El típico truco de reventa en el que se ofrece un bolígrafo por 100 euros e incluye la entrada para un multitudinario concierto.
Imagen | Anthony Barceló, ChrisGoldNY.
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La noticia Los Ángeles ha introducido un “impuesto a las mansiones” para los superricos. Así lo están esquivando fue publicada originalmente en Xataka por Rubén Andrés .