2022 tiene decidido dejarnos fuera de juego. Tras unas semanas de lluvias intensas, la Navidad amenaza con llegar… en manga corta. Sí, como suena. Días antes de que acabe el año, los modelos atmosféricos lo tienen claro: en muchas partes de la península se superarán los 20 grados y, ni lugares tan fríos como Burgos, bajarán de los 5 grados. ¡En diciembre! ¿Se ha vuelto el tiempo definitivamente loco?
¡¿Manga corta!. El invierno astronómico empieza con valores superiores a los 20 grados en muchas zonas de las provincias de Cádiz, Huelva, Sevilla, Alicante, Valencia, Málaga, Granada, Gipuzkoa, Cantabria y las Islas Baleares. Pero eso no es (casi) nada. Todo parece indicar que Murcia y la Comunidad Valenciana van a llegar a los 25 grados antes de Nochebuena.
Por si hay alguna duda: no, esto no es normal. Son temperaturas que podemos ver en las islas Canarias, pero no en la España peninsular. De hecho, en esta zona del país estamos viendo valores entre 5 y 6 grados por encima de la media. Según los datos de Irene Santa, podrían “darse valores dentro del percentil 95%: es decir, podrían darse temperaturas en el rango del 5% de temperaturas más altas del registro para la fecha”.
No es técnicamente una ‘ola de calor’. Y no lo es porque una ‘ola de calor’ requiere que se “registren máximas por encima del percentil del 95%”, sí; pero no de cualquier mes, sino de “la serie de temperaturas máximas diarias de los meses de julio y agosto del periodo 1971-2000”. A eso, afortunadamente, no llegaremos. No obstante, a poco que pensamos en las temperaturas y en la época del año en la que estamos, es inevitable admitir que es una barbaridad.
España, paraíso tropical. Hasta el punto que no va a hacer frío ni por la noche: según los modelos podemos olvidarnos de las heladas nocturnas y ni siquiera las zonas más frías de la Península sufrirán temperaturas bajo cero. No hay que olvidar que este otoño ha sido el más cálido registrado nunca en España y 2022 será el año más caluroso desde al menos 1961
Y casi ninguna lluvia. Solo Galicia (y aledaños) parece que va a recibir algunas lluvias en los próximos días. Por ello (y por la temperatura tan anormalmente alta) las cotas de nieve se van a ir por encima de los 2.000 metros de altura. O sea, este año el ‘Oh, Blanca Navidad‘ va a ser más bien retórico.
En este caso… no es una novedad. A diferencia de los muchos eventos atmosféricos extrañísimos de este año, 2022 está siguiendo aquí los pasos de 2021. Ambos finales de año tuvieron temperaturas ampliamente por encima de lo normal en la Península y en Baleares: el aeropuerto de Bilbao registró 25 grados el 31 de diciembre de 2021. Tener esto en mente ayuda a contextualizar el problema, sí; pero pone encima de la mesa una pregunta inquietante: ¿dos años son ya una tendencia
La respuesta no está clara. Sobre todo, porque seguimos con La Niña por tercer año consecutivo. La Niña hace que España deje de estar “bajo la influencia de la circulación subtropical” y eso suele provocar inviernos secos, pero la variabilidad es enorme. Sin ese influjo subtropical, el tiempo en la península, Baleares y el norte de África es mucho más variable de lo normal. Es decir, este patrón puede ser fruto de la casualidad más que de una tendencia clara de cambio.
– La noticia El invierno acaba de empezar y la previsión de AEMET ya lo da por muerto: la Navidad viene con manga corta fue publicada originalmente en Xataka por Javier Jiménez .