Empresas, profesionales y usuarios utilizan cada vez más los servicios en la nube (computación en la nube). El modelo se basa en diferentes capas, tratando con nuevos términos como IaaS, PaaS, SaaS, etc. Gracias a estos servicios, las empresas evitan grandes inversiones en software y hardware. Además, tienen las múltiples ventajas de almacenar todas las aplicaciones en la nube, lo que permite a sus empleados acceder a ellas desde cualquier dispositivo en cualquier momento y lugar. El mercado actual ofrece múltiples opciones en cada servicio, lo que facilita a los usuarios encontrar el servicio que mejor se adapte a sus necesidades. Las grandes empresas de TI como Microsoft, Amazon o Google no son ajenas a este hecho y ofrecen algunos de los mejores servicios de IaaS, PaaS y SaaS.

IaaS

Cuando hablamos de IaaS, estamos hablando de infraestructura como servicio. La empresa contrata la infraestructura de hardware con un tercero a cambio de tarifas o alquiler. La contratación de este hardware le permite elegir la potencia de procesamiento (procesador), la memoria (memoria RAM) y el espacio de almacenamiento (disco duro) que se utilizará. IaaS también proporciona servicios de virtualización como máquinas virtuales, firewalls, sistemas de respaldo o balanceadores de carga. IaaS es la base de los servicios y contiene los componentes básicos de TI en la nube porque proporciona los servicios y los marcos necesarios para crear otros servicios.

Microsoft también proporciona servicios IaaS para Azure. En él, puede realizar contratos de hardware personalizados en función de la CPU, la memoria, el almacenamiento y la velocidad de la red. En esta infraestructura, los clientes pueden ejecutar sus aplicaciones comerciales, como SAP o Sharepoint, sin preocuparse por el hardware necesario para hacerlo. Microsoft Azure destaca entre la gran cantidad de recursos que se pueden alquilar, lo que lo convierte en una opción ideal para empresas que tienen requisitos de infraestructura muy exigentes.

PaaS

Los servicios PaaS proporcionan plataforma como servicio. Puede iniciar aplicaciones como bases de datos, middleware, herramientas de desarrollo y servicios de inteligencia empresarial en estas plataformas. Este servicio es ideal para desarrolladores que solo quieren enfocarse en implementar y administrar sus aplicaciones. Al no tener que preocuparse por los recursos de hardware y software (sistemas operativos), pueden aumentar la eficiencia y centrarse solo en las partes que les interesan. PaaS es el más difícil de entender porque el término “plataforma” se puede confundir con software. La plataforma en sí es software, lo que permite el desarrollo de aplicaciones.

SaaS

El modelo de software como infraestructura aloja el software de la empresa y sus datos en servidores externos y paga por su uso. Cualquier empleado de la empresa puede acceder a las aplicaciones de la empresa desde cualquier lugar sin tener que instalarlo en la computadora local. Cuando hablamos de software en la nube, estamos hablando de SaaS. Con SaaS, la empresa solo se preocupa por cómo usar los programas de software necesarios para sus operaciones, mientras ignora los recursos restantes. El proveedor de servicios proporciona el hardware, el sistema operativo, las aplicaciones, etc. necesarios, y el proveedor de servicios también es responsable de mantenerlos correctos y actualizados. Todos los usuarios acceden a las aplicaciones SaaS todos los días, porque se puede decir que cualquier aplicación online que se ejecuta en la nube y se puede acceder a través de Internet es una aplicación SaaS.

Con esta plataforma de Microsoft, los usuarios pueden acceder a las herramientas de Microsoft Office (Word, Excel, Access, PowerPoint, etc.) desde cualquier dispositivo que se ejecute en los servidores de Microsoft. Los usuarios solo se preocupan por el uso de la aplicación y no tienen nada que ver con su instalación, mantenimiento y actualización.