Desde que Jeff Bezos creó Amazon, su vida privada ha sido relativamente tranquila. Al menos todo lo tranquila que puede ser la vida de una de las personas más ricas del mundo. Esa privacidad se rompió por completo cuando el millonario y su esposa anunciaron su divorcio, un hecho que, dada la fortuna de Bezos, despertó el interés de la prensa por el elevado coste económico que iba a suponer para el magnate la ruptura.
Años más tarde, el amor ha vuelto a llamar a las puertas de la mansión de Bezos y con él los gastos y movimientos millonarios que apuntan campanas de boda inminente.
Un divorcio milmillonario. Una separación sentimental no es plato de buen gusto para nadie, pero si además eres la persona más rica del planeta, el dolor asciende a otros niveles y, normalmente, va acompañado de muchos ceros.
Tras 25 años de matrimonio, el divorcio de Jeff Bezos convirtió a su esposa MacKenzie Scott en una de las mujeres más ricas del mundo tras firmar un acuerdo de ruptura por valor de 35.000 millones de dólares. Esta suma incluía un 4% de las acciones de Amazon de su fundador, pero a cambio, MacKenzie renunció al control de The Washington Post y de Blue Origin.
10.000 millones al año para Blue Origin. El fundador realiza cada año varias rondas de venta de acciones de Amazon, que utiliza para financiar sus proyectos e inversiones, entre las que Blue Origin toma principal protagonismo. Desde Bloomberg apuntan que desde finales de 2022, Bezos ya habría vendido acciones por valor de 30.000 millones de dólares destinados a sufragar los gastos de desarrollo de los cohetes de Blue Origin y los caros yates del magnate.
Tras su divorcio, el millonario todavía conserva unos 988 millones de Amazon, lo que supone un 10% de las acciones de la compañía. En una de sus habituales operaciones de capitalización, Bezos envió a la Comisión de Bolsa y valores de Estados Unidos una orden de venta sobre 1,67 millones de acciones de Amazon con la que el fundador se embolsó 240 millones de dólares. Todo apunta a que Bezos no ha terminado todavía sus operaciones y en los próximos días repetirá la operación vendiendo entre 8 y 10 millones de acciones, lo cual le reportaría una liquidez de más de mil millones de dólares adicionales.
Noviazgo de telenovela. Jeff Bezos se ha mostrado especialmente activo durante el último año en sus inversiones inmobiliarias, comprando mansiones en Beverly Hills y en las zonas más exclusivas de Miami, donde finalmente se ha mudado recientemente comprando también la mansión de su vecino.
Uno de los motivos para ese afán por crear un “hogar” responde al apasionado romance de telenovela con la empresaria y presentadora Lauren Sánchez, que no ha estado exento de polémica en las redes sociales ante la publicación de un reportaje fotográfico con estética “cowboy” en la revista Vogue.
Suenan campanas de boda y Bezos paga el banquete. Desde Street apuntan a que la venta adicional de acciones que Jeff Bezos acaba de realizar responde a la preparación de una inminente boda de la pareja, tras la fiesta de compromiso que se celebró este verano a bordo de su superyate Koru que contó con testigos de excepción con invitados como Bill Gates, Salma Hayek, Kris Jenner u Oprah Winfrey.
Si Bezos piensa gastar en su boda el capital que acaba de conseguir con su última operación de ventas, no nos cabe duda que conseguirá colgar un nuevo récord como evento social más caro, y podrá colgar su récord junto a la factura que pagó por su yate.
En Xataka | Jeff Bezos prometió donar 10.000 millones a fundaciones benéficas. Está muy, muy lejos de esa cifra
Imagen | Keith HInkle
– La noticia La fortuna milmillonaria de Jeff Bezos se enfrenta a dos problemas ajenos a sus negocios: su divorcio y su boda fue publicada originalmente en Xataka por Rubén Andrés .